La Guardia Civil ha descubierto que un joven de 21 años presuntamente vendía drogas en una vivienda de Dolores a raíz de que éste fuera denunciado por amenazar con una escopeta a su abuela, por un motivo distinto a los estupefacientes.
Según el Instituto Armado, al joven se le intervino en el domicilio, propiedad de su abuela aunque es usado como residencia por el nieto, pequeñas cantidades de cocaína, hachís y marihuana, así como efectos para manipular las sustancias estupefacientes.
Este punto de venta de droga al menudeo se descubrió a partir de la llamada de la abuela, que avisó a la Guardia Civil de que su nieto le había amenazado con una escopeta por un motivo familiar distinto de las drogas.
Al presentarse en la vivienda varias patrullas, los agentes localizaron el arma de fuego usado para las amenazas y, al mismo tiempo, se observaron diversas cantidades de drogas y utensilios normalmente usados para su venta.
Por ello, se procedió a un registro en el que se intervino una tableta de hachís, tres bolsas de plástico con un gramo de cocaína cada una, otra bolsa con 70 gramos de marihuana, un aparato para triturar este estupefaciente y una balanza de precisión.
También había una maceta con una planta de marihuana de unos 50 centímetros de altura, otras 19 más pequeñas también con la misma planta, dos ventiladores, una pantalla reflectora y un medidor de temperatura, entre otros efectos. El nieto quedó detenido por un presunto delito de tráfico de drogas y amenazas.
