Accidente aéreo con dos fallecidos en las inmediaciones del aeródromo de Mutxamel. Una avioneta se estrelló ayer junto a la carretera que une este complejo con la urbanización Valle del Sol, perdiendo la vida sus dos ocupantes, uno de ellos de Villena y el otro de Gandia.

La investigación apunta a que el aparato pudo colisionar con un tendido de alta tensión, debajo del cual acabó la aeronave, cuando iniciaba la maniobra para aterrizar. O bien tocó el cableado y ello causó el accidente o bien al intentar esquivar el tendido perdió el control de la avioneta, señalaron desde el Consorcio Provincial de Bomberos, aunque no se descartan otras hipótesis. Una comisión de Aviación Civil investigará las causas del siniestro, aunque no hubo contacto previo con la torre de control del aeródromo avisando que tuviera algún tipo de problema o avería.

Varios pilotos conocedores de la zona advirtieron ayer del riesgo que representa este tendido de alta tensión, que en ese punto se eleva hasta la cima de un cerro en una zona por la que entra el 90% de los aparatos que aterrizan en el aeródromo, al estar muy cerca de la cabecera de la pista. Además, tampoco cuentan los cables con las señalizaciones que se suelen poner para las aves.

El siniestro tuvo lugar en un bancal abandonado junto a la granja «Los huevos de Paco» pasadas las 10.30 horas. Su dueño, Paco, explicó que «de repente se ha escuchado un ruido muy fuerte y las gallinas se han asustado. Hemos salido y hemos visto la avioneta boca abajo, saliendo humo y un fuerte olor a queroseno. Hemos llamado al 112 y en cinco minutos estaban ya aquí. Por esta zona pasan siempre las avionetas volando muy bajo y ya han habido varios sustos».

Al lugar acudieron varias ambulancias, bomberos, Policía Local, Policía Nacional, Guardia Civil y un helicóptero medicalizado. En un primer momento uno de los ocupantes aún estaba con vida, pero murió sin dar tiempo a auxiliarle ni rescatarle del aparato. La escena era dantesca y las heridas mortales de necesidad, según explicaron varios efectivos de rescate. El otro falleció en el acto.

Los bomberos tuvieron que dar la vuelta al aparato para poder sacar los cadáveres. Se trataba de dos hombres de mediana edad, uno de Villena y el otro, Juan R. M., un empresario de Gandia.

La aeronave había salido del aeródromo de Biar-Beneixama y había hecho escala en el de Alcocer de Planes. Fuentes cercanas a la investigación señalaron que el piloto contaba con una gran experiencia y conocía perfectamente la zona, de la que era un asiduo visitante.

Aunque en esta ocasión la avioneta se estrelló en una zona más deshabitada, en un bancal abandonado, en otras ocasiones los vecinos recuerdan que han caído junto a viviendas de la urbanización Río Park, como en octubre de 2013. Entonces el aparato se enganchó con unos cables de un tendido de media tensión y el piloto resultó herido muy grave. Los residentes denuncian que el aeródromo cada vez soporta un mayor tráfico de avionetas, que además vuelan muy bajo y pasan sobre las numerosas viviendas de esta urbanización, donde existen centenares de chalés y desde donde vienen alertando de esta situación. Temen que algún día caiga un aparato sobre alguna casa.