El barrio alicantino de Colonia Requena fue tomado ayer tarde por numerosos agentes de la Policía Nacional y la Policía Local para realizar un amplio control preventivo que incluyó numerosas identificaciones y varias inspecciones de establecimientos comerciales. Ambos cuerpos policiales acudieron con sus respectivas unidades caninas para emplear los perros en detección de sustancias estupefacientes. La operación concluyó sin incidentes.
