«La clínica está abierta y estamos trabajando con normalidad. Los doctores han venido a trabajar y todos los pacientes que tenían cita programada están siendo atendidos». Éste es el mensaje de tranquilidad que se repitió ayer en una de las clínicas Vitaldent de Alicante tras la detención de la cúpula de la marca por un supuesto fraude.

«Los clientes están llamando preocupados pero tratamos de tranquilizarles aunque no sabemos muy bien qué decir, ya que por el momento sólo sabemos lo que hemos leído en la prensa», confesó una trabajadora que prefirió mantener su nombre en el anonimato.

«Desde la central de Madrid nos han comunicado que no nos preocupáramos, que la cosa no iba con nosotros», señaló. Pero lo cierto es que, a pesar del mensaje de tranquilidad que se quiere transmitir, entre los trabajadores también hay una cierta incertidumbre. «Nosotros estamos tranquilos porque aquí no hemos hecho nada, pero no sabemos qué va a pasar. Nos ha pillado totalmente de sorpresa, pero visto lo visto no nos sorprende nada», concluyó la trabajadora de la clínica.