Dos incendios ocurridos en Santa Cruz de Tenerife y en la localidad catalana de Granollers han acabado en menos de 24 horas con la vida de dos madres y de sus dos hijos.

En la Costa del Silencio, en el municipio tinerfeño de Arona, una madre de 40 años y su hijo de tan sólo 5 fallecieron pasada la medianoche de ayer al incendiarse su apartamento. El suceso se produjo sobre las doce y cuarto de la noche, cuando numerosas llamadas de vecinos alertaron de que estaban viendo salir llamas de un apartamento en la calle Hércules, en la zona de Ten-Bel. Vecinos de la comunidad intentaron apagar el fuego con mangueras y extintores, pero eso no evitó que al llegar al lugar los bomberos el incendio estuviera ya muy avanzado.

El cuerpo de la madre fue hallado en el baño, que no había resultado afectado por las llamas, por lo que pudo haber muerto por asfixia. El pequeño, sin embargo, apareció carbonizado en la habitación de la vivienda.

Tras recuperar los cuerpos, efectivos del Consorcio de Bomberos, con base en el Parque de San Miguel, finalizaron la extinción del incendio y ventilaron el inmueble, que quedó totalmente calcinado.

Y en la tarde de ayer, dos mujeres, madre e hija, murieron en un incendio en los bajos de un edificio, situado en el Camí Vell de Canovelles, en Granollers (Barcelona). Según informaron fuentes del Ayuntamiento, una tercera persona, el marido y padre de las dos víctimas mortales, que se hallaba en el interior del local, ha sido trasladado al hospital con quemaduras, aunque se desconoce su gravedad.

Los bajos donde ha tenido lugar el incendio estaban ocupados por un centro de masajes. Además de haber quemado totalmente el piso, el fuego ha dejado diversos afectados por el humo.