Un hombre falleció carbonizado en el incendio de una vivienda que tuvo lugar el miércoles en Benicàssim y, según fuentes cercanas al caso, la muerte podría haber sido intencionada. Estas mismas fuentes señalan la posibilidad de un supuesto «ajuste de cuentas» como móvil del crimen.

Fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos indicaron ayer que el suceso se inició, por causas no precisadas, poco después de las 23 horas del miércoles en un chalet adosado situado en la calle Ibiza, número 11. El aviso fue dado por un vecino de la zona quien, alertado por el fuego, llamó al 112. El fuego destruyó una de las habitaciones, mientras que el humo afectó al resto de la vivienda, según indicaron las mismas fuentes.

Una vez extinguido el fuego, los bomberos realizaron una inspección de la vivienda y encontraron el cadáver de una personada en la habitación donde se registró el incendio. Junto al fallecido, los servicios de emergencia también hallaron a un perro que también falleció a consecuencia del incendio.

Fuentes del Consorcio de Bomberos indicaron al respecto que la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación de los hechos y determinará la identidad de la persona fallecida, ya que el cadáver estaba carbonizado y al cierre de esta edición todavía no había podido ser identificado.

Ayer, varios la Guardia Civil estuvo en la vivienda para investigar las causas del fallecimiento.

Las circunstancias en las que fue hallado el cadáver son bastante extrañas. Aunque en el primer aviso se indicaba que la vivienda estaba vacía, las fuentes consultadas por este diario precisaron que en el lugar del fallecimiento se encontraron restos de sangre y algún arma.

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