Un juzgado de lo Penal de Alicante sentó ayer en el banquillo a un joven y al portero de seguridad de una conocida discoteca del centro de Alicante por una pelea a la entrada del local la madrugada del 27 de febrero del año 2009. El cliente se enfrenta a una pena de seis meses de cárcel por la agresión al portero, mientras que a éste se le reclama una falta de lesiones.

Los hechos ocurrieron después de que el portero hubiera denegado la entrada al local al joven acusado, que poco antes había sido expulsado del interior junto a varios de sus amigos. Según el escrito de acusación, se inició una disputa entre ambos con forcejeos y empujones, durante la cual el cliente acabó propinando varios golpes y puñetazos al portero de seguridad, causándole lesiones que tardaron más de 35 días en curar. Asimismo, en el transcurso de esa pelea este acusado agredió también a otro joven que intentaba recoger una chaqueta del interior al confundirle con otro de los porteros. Por esta agresión el fiscal le reclama una multa de 180 euros.

Durante la pelea, el cliente imputado por la agresión recibió un puñetazo en la cara que le rompió la mandíbula, pero el ministerio público no ha considerado probado que fuera el portero quien le agrediera, por lo que sólo acusa al empleado de seguridad de una falta de lesiones y le reclama una multa de 405 euros. Las lesiones imputadas al portero son contusiones en la cadera y en la zona costal, así como erosiones y arañazos en la rodilla y el cuello.

El abogado del portero, el letrado Aitor Esteban Gallastegui, reclamó al cliente agresor la pena mínima por estos hechos y una indemnización de 2.700 euros. El otro acusado estaba representado por el abogado Miguel Ángel Cánovas.