El balance general de la criminalidad sigue a la baja en la provincia respecto a la media nacional pero la escalada de homicidios y asesinatos continúa al alza y en los nueve primeros meses del año la cifra se ha disparado un 91,7%, al pasar de 12 a 23 crímenes, según se recoge en el último informe difundido ayer por el Ministerio del Interior. Así, mientras que en España los crímenes se han reducido en un 10,5 por ciento entre enero y septiembre, en Alicante prácticamente se han duplicado.

Por el contrario, el resto de indicadores de la criminalidad en Alicante ofrece datos más alentadores porque en términos generales los delitos y faltas en la provincia han bajado 5,3 puntos al pasar de 75.252 a 71.235, unos cuatro mil menos. Esta disminución casi duplica la media nacional, que ha sido del 2,8 por ciento, y es similar al descenso del 5,4% en la Comunidad Valenciana.

También es importante el descenso del 11% en los robos con fuerza en viviendas (6.268 frente a 7.040 del mismo periodo de 2014) y la reducción de un 6,5% de los robos con violencia e intimidación, que han pasado de 1.639 a 1.532.

Elda sigue a la cabeza

El municipio de Elda es quien aparece una vez más como la zona de la provincia donde se ha registrado un mayor descenso de la delincuencia, en concreto de un 11,2 por ciento. La Comisaría de Elda-Petrer ha pasado de registrar 1.204 delitos y faltas en los nueve primeros meses del año 2014 a 1.069 en el mismo periodo de 2015.

En otro tipo de delitos el balance de Interior sobre la criminalidad en la provincia refleja descensos mínimos, como es el caso de los hurtos, con un descenso del 1,4%, y el robo de vehículo, que disminuye un 1 por ciento.

El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, señaló ayer que la Comunidad registra el menor índice de criminalidad de toda la serie histórica con una tasa de 47,4 infracciones penales por 1.000 habitantes, lo que se traduce en casi dos puntos menos que el año pasado (49,4) y cerca de 20 puntos menos que hace diez años, cuando la tasa se situaba en 66,8 delitos por 1.000 habitantes. Por provincias, en Alicante la tasa se ha reducido 2 puntos y se sitúa en 50 por cada mil habitantes.