La Policía no descansa en su lucha diaria por la prevención de la seguridad ciudadana y ayer llevó a cabo un nuevo despliegue en la zona norte de Alicante, aunque en esta ocasión el operativo fue más espectacular y más de medio centenar de agentes se desplegaron por la tarde en los barrios de Juan XXIII Segundo Sector y Colonia Requena. Allí realizaron 143 identificaciones en establecimientos de hostelería y locutorios. Realizaron chequeos en 13 puntos y abrieron un acta por tenencia ilegal de drogas, dos por arma blanca e impusieron seis sanciones administrativas.

Como ocurrió la noche anterior en la zona norte de Alicante, el despliegue contó con efectivos de la Policía Local, Policía Nacional y Policía Autonómica. Durante más de dos horas estuvieron movilizados en dos barrios que literalmente fueron tomados por varios equipos que se repartieron los establecimientos donde se realizaron de forma simultánea las inspecciones e identificaciones.

Poco antes de las seis de la tarde de ayer los agentes se desplegaron en la calle Periodista Francisco Bas Mingot, conocida como «la cuesta». En el operativo participaron las unidades caninas de la Policía Nacional y Policía Local con perros adiestrados en detección de estupefacientes, agentes de la Comisaría de Distrito Norte, de la Unidad de Prevención y Respuesta de la Policía Nacional y del Grupo Operativo de Intervención Rápida (GOIR) de la Policía Local, así como otros efectivos de ambos cuerpos y de la Policía de la Generalitat.

Durante la primera fase de este amplio control no se practicaron detenciones ni se produjeron incidentes. Tras la batida en Juan XXIII el operativo policial se trasladó a la calle Cuarzo.

Este es el cuarto operativo de seguridad ciudadana que se realiza en apenas una semana en barrios de la zona norte de Alicante. En el despliegue realizado el jueves por la noche los agentes realizaron una veintena de identificaciones y levantaron un acta por tenencia de sustancias estupefacientes.

Los vecinos de Juan XXIII reclamaron recientemente más presencia policial en la zona por una oleada de robos que se frenó tras la detención de los implicados.