La Audiencia de Alicante ha impuesto 20 meses de prisión a un joven por lesionar a su pareja, menor de edad, aunque le absuelto del delito de detención ilegal del que también estaba acusado porque la ventana por la que huyó la víctima "no tenía ninguna medida de seguridad y era fácilmente accesible", según el fallo.

La sentencia, hecha pública hoy, admite que la menor pudo "sentirse constreñida psíquicamente para marcharse por temor a la reacción de su compañero sentimental", pero no ha quedado "claramente acreditado que le tuviera inmovilizada o encerrada".

De hecho, "la vivienda tiene una ventana a baja altura, fácilmente accesible y que carece de reja o cualquier otra medida que impida su acceso y fácil apertura", razonan los magistrados.

El procesado, que se encuentra en prisión provisional por esta causa, se enfrentaba a una posible condena de hasta 7 años y 8 meses de prisión por estos hechos, ocurridos en un domicilio de la partida de la Florida del municipio de Dolores el pasado 8 de febrero.

Según el tribunal, el acusado, de 20 años, mantuvo una discusión con su pareja, de 16 y con la que llevaba poco más de un mes conviviendo, al creer que ella había tenido una relación sentimental con otro chico, y le propinó varios puñetazos y patadas en la cabeza y en la cara mientras le llamaba "zorra" y "puta".

El acusado le había dejado incluso incomunicada al romperle la tarjeta de su móvil cuando la menor se fue a vivir con él, y, al día siguiente de la primera agresión, le dio una nueva paliza en la que llegó a cogerla por los pelos para arrastrarla por toda la casa.

El 10 de febrero, por la mañana, la joven huyó de la vivienda por una ventana tras aprovechar la ausencia de su novio, quien, precisamente, había acudido al juzgado de Violencia sobre la Mujer de Orihuela por una denuncia de malos tratos de su anterior pareja.

La Audiencia de Alicante entiende que no hay pruebas para condenar al procesado por un delito de detención ilegal, pero sí le impone sendas penas de 10 meses de cárcel por dos delitos de lesiones, así como dos años de alejamiento y una indemnización de 2.000 euros a la víctima.