Un hombre aceptó ayer una condena de trece años de prisión por matar en septiembre de 2013 a su pareja sentimental, con la que vivía durante más de diez años y a la que dio cuatro puñaladas cuando, estando en la casa que compartían en Valencia, creyó que ella se estaba riendo de él. En un juicio con jurado celebrado ayer en la Audiencia de Valencia, las partes alcanzaron una conformidad que incluye también la prohibición del hombre de acercarse y comunicarse con las tres hijas de la víctima en 18 años, y deberá indemnizarlas con cantidades que van de los 50.000 a los 99.000 euros por las secuelas psicológicas que sufren. Esta condena, por un delito de asesinato, contempla la circunstancia agravante de parentesco así como la eximente incompleta de enfermedad mental del procesado, afectado por un trastorno inducido por alcohol compatible con ideación delirante celotipia (forma extrema de celos). Los hechos tuvieron lugar el 14 de septiembre de 2013, cuando José Antonio, de 45 años, mantenía una relación análoga a la matrimonial con Manuela durante más de 10 años, y ambos vivían en la casa de él con una de las tres hijas de ella (de 13 años). El acusado se bebió una cerveza y se fue a la cocina a por otra y a cortar fiambre. Entonces, oyó risas en la calle y, pensando que era Manuela quien se reía de él, fue al salón con el cuchillo que estaba utilizando y se lo clavó a la mujer en el pecho y cuello. EFE