Un psiquiatra que atendió a Rosario Porto afirmó ayer que, tras la muerte de su hija Asunta, de la que está acusada, le recomendó un aumento de la dosis de Orfidal, una medicación que pudo causar en ella «una amnesia, sobre todo para hechos recientes».

En la última jornada del juicio dedicada a pruebas periciales, comparecieron, a petición de la defensa, los tres profesionales de la medicina que atendieron a Rosario Porto, desde el año 2009 hasta la actualidad. Así, el psiquiatra Ramiro Touriño comenzó a ver a Rosario Porto el 30 de julio de 2013, cuando ella presentaba un cuadro clínico de depresión mayor. A esta primera consulta fue acompañada por su exmarido, el periodista Alfonso Basterra, que sugirió a este especialista que Rosario podría sufrir un trastorno bipolar, algo que fue descartado. Pero ante el cuadro depresivo que presentaba la acusada, este psiquiatra le prescribió Orfidal, además del antidepresivo Prozac.

La defensa de Alfonso Basterra pidió la exhibición del listado de compras farmacéuticas de ambos acusados, donde se pudo ver que el acusado compró el 22 de julio el ansiolítico Orfidal y el antidepresivo Prozac. Todo ello se adquirió una semana antes de que la misma medicación fuese pautada para Porto, que fue a consulta el mencionado día 30.

Según explicó ayer el doctor Touriño, Rosario Porto le había dicho que en meses anteriores nunca había tomado Orfidal, pero en cambio en la sala sí llegó a admitir haber tomado algún comprimido «suelto» cuando no se encontraba bien. Esta medicación contribuyó a la mejora de la salud mental de la acusada, puesto que en la última sesión que tienen el 18 de septiembre de 2013, «la mejoría es evidente», dijo ayer Ramiro Touriño.

Este especialista tuvo constancia de la muerte de Asunta el 22 de septiembre de ese mismo mes, a mediodía, y a través de una llamada de Rosario Porto, en la que la notó »muy angustiada», por lo que él mismo sugirió aumentar la dosis de Orfidal. La toma de este fármaco pudo causar cierta pérdida de recuerdos recientes, según apuntó.

El experto de psiquiatría que atendió a Rosario Porto desde agosto del 2014 hasta el 10 de octubre del mes ahora en curso, Luis Ferrer, relató ayer que en sus encuentros en prisión presentaba un cuadro depresivo mayor.

El doctor Julio Brenlla, que la atendió en 2009, confirmó que «es posible» que le recomendase Lorazepam, puesto que ella se quejaba de problemas para dormir.