La prueba de ADN realizada a Ahmed Cheld, el supuesto asesino de la joven Eva Blanco, ha revelado que coincide con la muestra hallada en el cuerpo de la víctima tras el crimen cometido en Algete (Madrid) en 1997, informaron fuentes de la investigación. La jueza de Instrucción número 4 de Torrejón de Ardoz (Madrid) decretó el pasado día 9 prisión provisional, comunicada y sin fianza para Ahmed Cheld, tras haber sido entregado por Francia, donde fue detenido.

La magistrada imputa delitos de asesinato, agresión sexual y detención ilegal al detenido, que se negó a declarar, si bien consintió que se le practicara una prueba de ADN para cotejarlo con el de la muestra hallada en el cuerpo de Eva Blanco.

El ADN fue determinante en la investigación, pues el recogido al hermano del presunto asesino arrojó un alto nivel de coincidencia con el extraído de la muestra tomada en el cuerpo de Eva Blanco, encontrado en la cuneta de una carretera próxima a Algete el 20 de abril de 1997. Gracias a esa línea de investigación se llegó a Ahmed Cheld, de 52 años, español de origen marroquí, que fue detenido en la localidad francesa de Pierrefontaine Les Varans.

La clave del caso fue el análisis genético de la muestra encontrada en el cuerpo de Eva Blanco que se hizo en el Instituto de Ciencias Forenses de la Facultad de Medicina de la Universidad de Santiago de Compostela. Ese informe, que se pudo practicar gracias a los avances en genética forense, permitió identificar un centenar de marcadores genéticos y concluir que la muestra de ADN correspondía a un varón de origen norteafricano. Con ese dato, la Guardia Civil analizó el censo de Algete entre 1995 y 1999 y acotó la investigación sobre 300 personas, a las que buscó en diferentes puntos de España, hasta que localizó al hermano del ahora detenido.