Una mujer de 50 años y nacionalidad marroquí fue detenida ayer con dos kilogramos de hachís en la estación de autobuses de Alicante durante uno de los controles rutinarios que llevaba a cabo de forma periódica la Unidad Canina de la Policía Local.

La arrestada viajaba en un autobús procedente de Algeciras que se dirigía a Barcelona y realizó una escala en Alicante. Los agentes de la Unidad Canina subieron al autocar con los perros adiestrados para detectar droga y al pasar junto a la mujer ahora detenida no la marcaron. Sin embargo, al inspeccionar la bodega del autocar uno de los canes marcó una maleta.

Para identificar al propietario de la maleta sospechosa la Policía Local pidió a los pasajeros que recogieran sus equipajes, momento en que la mujer fue descubierta y detenida tras comprobar que ocultaba más de 200 bellotas de hachís con un peso de unos dos kilos. La droga iba mezclada con especias para tratar de evitar la detección.