Sobre los restos de su ADN hallados en la ropa interior de Asunta su padre afirmó que ella se acostaba vestida y que, a medida que se iba quitando la ropa, se la iba pasando, con lo que sólo habría tocado esta pieza con las manos y en ese contexto. Y acerca de las fotografías de en las que la niña aparecía con una vestimenta como de un cabaré, Basterra dijo que se trataba de una función de ballet y a que a su hija le gustaba disfrazarse. Basterra arremetió contra los medios de comunicación por acusarle de pederastia raiz de hacerse públicas estas fotos.

«Me acusaron de pederastia a mí; no saben lo que es eso en la cárcel, se me pusieron aquí», señaló mientras hacía un gesto con la mano en su cuello. Aseguró que pensó que le «mataban» en prisión en insistió en que que cualquier padre tiene fotos de su hija. Mientras su letrado le mostraba la imágenes y el presidente del tribunal pidió limitaciones en caso de referirse a la menor, a lo que Basterra exclamó: «¡a buenas horas!». En cuanto a las cuerdas halladas junto al cadáver de la niña, afirmó que, en efecto, su suegra tenía unas similares en la casa de Teo (A Coruña), donde supuestamente mataron a Asunta, para embalar cajas. E. PRESS