La rápida movilización de avionetas y helicópteros de extinción evitó ayer que las llamas se le subieran a las barbas al Montgó. Pasadas las 19.00 horas una columna de humo alertaba de que el parque que comparten Xàbia y Dénia sufría un nuevo incendio. Aún está en la retina el que en septiembre devastó 444 hectáreas. El incendio comenzó en una cuneta de la calle Latres que da al parque natural. Una vecina fue la que avisó a la Policía Local del incendio. Aseguró a este diario que vio cómo un coche de color amarillo abandonaba la zona.

El origen del fuego no estaba ayer claro. Los voluntarios de Protección Civil acudieron al instante y, con el camión cuba, empezaron a atacar el frente de llamas. El viento no soplaba con fuerza y aún había horas por delante para sofocar el fuego y evitar que avanzase hacia la Plana Justa y las zonas de más valor ecológico. Avionetas y helicópteros llegaron pronto y empezaron a descargar agua. El alcalde, José Chulvi, seguía las tareas de extinción con la certeza de que esta vez se había actuado desde el aire sin retraso.

Mientras, la Policía Local desalojó tres chalés por precaución. El fuego estaba unos metros más arriba, pero la humareda era intensa. Los bomberos, Protección Civil, los efectivos de Acif y las brigadas forestales participaron en la extinción y a las 20.30 horas ya no quedaban llamas. El incendio había calcinado unas dos hectáreas. Este incendio se produce después del de la pasada semana en la Vall d'Ebo, el más grave hasta ahora y el peor en 20 años en la provincia y que calcinó 1.700 hectáreas.