Los policías que investigaron el tiroteo entre dos clanes en la Colonia Santa Isabel de San Vicente concluyeron que hubo fuego cruzado entre los dos clanes implicados, según declararon ayer durante la segunda jornada de este juicio en la Audiencia de Alicante. «Inicialmente desde el bando de los heridos, nos decían que les habían recibido a tiros», declaró ayer el instructor del atestado, sin embargo, a medida que fueron entrevistando a más testigos les señalaron que hubo disparos por las dos partes.

Los hechos ocurrieron en julio de 2013 al registrarse un enfrentamiento a tiros entre los clanes de los Wenceslao y los Gallego, que se saldó con dos heridos de este último clan. En el banquillo se sientan seis acusados, tres miembros de cada clan, entre ellos los heridos y se imputa a cada uno tres delitos de intento de homicidio. Una séptima persona está acusada de haber ayudado a otro de los implicados a deshacerse de su pistola.

Los agentes declararon ayer que recogieron cerca de 23 casquillos de hasta tres calibres diferentes en el lugar del escenario del tiroteo, sin embargo ninguno pudo precisar los lugares en los que se produjeron los impactos. Desde el clan de los Gallego se asegura que ellos no llevaban armas y que no dispararon, mientras que los Wenceslao dicen que trataban de defenderse de los disparos de sus rivales. Sobre las trayectorias de los disparos se tendrán que pronunciar los agentes de balística que declararán el viernes.

Las identificaciones de los acusados se hicieron por las declaraciones de los testigos con los que se entrevistaron los agentes después de llegar a la zona del tiroteo. Según testificaron los policías, desde el bando de los heridos les dijeron que el enfrentamiento había sido por una deuda de drogas pero después rectificaron para decir que era por una deuda por cobre. «Nadie decía la verdad y cada uno contaba lo que mejor venía a los intereses de los suyos», dijo uno de los agentes.

El despliegue policial para evitar incidentes se mantuvo ayer, aunque tampoco hubo que lamentar altercados. Para hoy se espera la jornada de mayor tensión porque será el momento en que los testigos tengan que ir a declarar y concretar a qué personas vieron disparando durante aquel día.