La Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a penas que suman 28 años, seis meses y dos días al hombre acusado de haber abusado sexualmente de sus dos hijas menores de edad durante cinco años en el domicilio familiar, según confirmaron a este diario fuentes de la Fiscalía. El fallo le condena por dos delitos continuados de agresión sexual, imponiendo prácticamente la misma pena que se le solicitaba desde el ministerio público, y obliga al procesado a tener que indemnizar a cada menor con 30.000 euros por daños morales.

Los abusos ocurrieron en distintos momentos cuando las menores tenían once y nueve años de edad respectivamente, según denunciaron ambas y ahora ha declarado probado la sentencia de la Audiencia. Los hechos comenzaron antes de que la familia se estableciera en la provincia, primeramente con tocamientos a la mayor de las dos jóvenes. Cuando ésta cumplió los once años, empezaron a consumarse las agresiones sexuales con penetración empleando amenazas y violencia físicas para reducir la resistencia física de la niña. En el caso de la otra menor, las agresiones sexuales comenzaron cuando ésta tenía nueve años, también obligándole por la fuerza.

El acusado, que se encontraba en prisión, había negado todas las acusaciones y mantenía que estas agresiones nunca habían llegado a existir. Los jueces se han basado para fundamentar la condena en el testimonio de las dos víctimas, a las que han dado total credibilidad al haber aportado detalles de cómo se produjeron los hechos. El fallo se apoya también en los informes psicológicos, donde los peritos consideraban verosímil todo lo que las dos jóvenes contaron a la hora de interponer la denuncia. Han sido los informes periciales una de las claves del caso, ya que el tribunal dedicó la segunda jornada de la vista oral a escuchar los informes de los profesionales que se habían entrevistado con las dos jóvenes para evaluarlas.

La primera jornada se centró en el interrogatorio del acusados y las víctimas, así como del entorno familiar. Asimismo, otro aspecto en el que se han basado los jueces ha sido la declaración de la madre que corroboró con sus horarios de trabajo los momentos en los que se producían los abusos y que eran los momentos que el acusado elegía para poder forzarlas, aprovechando que se quedaba a solas con ellas. Posteriormente, las menores acabaron quedándose a vivir sólo con el padre a partir del año ???? por razones económicas, momento en el que se reanudaron los abusos sexuales sobre ambas mientras estuvieron hasta el verano de ????. En la actualidad ambas ya son mayores de edad y tratan de rehacer su vida tras los supuestos abusos cometidos por su propio progenitor. El juicio se celebró a puerta cerrada para preservar la intimidad de las dos jóvenes.