Agentes de la Policía Nacional de Murcia y de la Guardia Civil de Alicante han detenido en una operación conjunta a tres personas con más de siete kilogramos y medio de cocaína que transportaban ocultan en un monovolumen interceptado en la autovía Alicante-Madrid a la altura de El Rebolledo.
Las investigaciones se iniciaron el pasado mes de julio tras detectar un grupo organizado que presumiblemente se estaba dedicando a transportar droga desde las provincias de Valencia y Madrid hasta la Región de Murcia. El grupo empleaba vehículos preparados con dobles fondos o «caletas», compartimentos artesanales que habilitan en los coches para ocultar droga y que cuentan con mecanismos electrónicos de apertura y cierre, lo que dificulta su detección por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.
Las pesquisas permitieron identificar varios vehículos sospechosos de ser empleados para llevar droga, así como un club de alterne situado en el municipio murciano de Fortuna, que también era usado supuestamente para las actividades de narcotráfico.
La Guardia Civil y la Policía desplegaron el pasado día 19 un operativo conjunto y detectaron a un vehículo procedente de Madrid que circulaba en dirección Alicante a velocidades muy elevadas. Dicho vehículo era un monovolumen que fue interceptado de madrugada a la altura de El Rebolledo y en su interior los agentes descubrieron la droga en dos dobles fondos habilitados en el salpicadero y en los asientos traseros. En concreto había siete paquetes con 7.540 gramos de cocaína, por lo que se detuvo al conductor, un español de 50 años, y a la dueña del vehículo, una rumana de 37 años.
Tras incautar la droga se realizaron tres registros domiciliarios en la Región de Murcia, uno en Santomera, otro en El Esparragal y otro en el club de Fortuna, donde arrestaron a una mujer rumana de 31 años por tráfico de drogas.
