La Policía Nacional ha intervenido en Melilla 313 kilos de hachís que estaban ocultos en un doble fondo practicado en el suelo de un camión refrigerador, cuyo conductor, un murciano de 57 años residente en Alicante, fue detenido como presunto autor de un delito contra la salud pública.

En una nota de prensa, la Jefatura Superior de Policía informó ayer de que esta intervención fue fruto de laboriosas investigaciones llevadas a cabo por la Unidad de Drogas y Crimen organizado (UDYCO), que tenía «fundadas sospechas» de que el camión pudiera llevar hachís oculto en su interior.

La Policía interceptó el vehículo cuando circulaba de madrugada por la Avenida de la Marina Española, en pleno centro de Melilla, y se dirigía hacia el puerto para embarcar en un buque con destino Motril. En el posterior registro del camión, los agentes encontraron ocultos 404 paquetes de hachís en un doble fondo practicado en el suelo del remolque-refrigerador. El peso bruto total de los paquetes llegó a los 313 kilogramos.

Las labores de extracción del hachís se alargaron durante más de dos horas, ya que los agentes tuvieron que desmontar todo el suelo del camión. La droga se encontraba envasada al vacío e impregnada en una sustancia para enmascarar su olor, según ha informado la Policía.