La Policía Nacional ha detenido en Alicante a ocho menores e imputado a otras seis personas, también menores de edad excepto un joven de 19 años, por su presunta participación en actos de vandalismo en diferentes trayectos y líneas del TRAM en la ciudad, unos desórdenes públicos que habían generado gran alarma social entre los usuarios del tranvía y los empleados, los cuales fueron víctimas de amenazas.
La Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante inició las investigaciones a mediados del pasado mes de septiembre tras la denuncia presentada por un responsable del TRAM que alertó de la presencia de un grupo de menores de edad que se dedicaban a alterar el normal funcionamiento de los tranvías y llegando en ocasiones a poner en riesgo tantos sus vidas como las de los pasajeros y empleados de la empresa de transportes que iban en el convoy de la línea ferroviaria. Como publicó este diario el pasado septiembre, la banda de menores se desplazaba de Alicante a San Vicente del Raspeig, municipio donde también hacían gamberradas.
Según la información facilitada ayer por la Comisaría Provincial de Alicante, los investigadores comprobaron que los menores accedían a diferentes líneas del TRAM sin billete e insultaban y amenazaban a pasajeros y trabajadores. Una vez en marcha el tranvía accionaban la palanca de freno de emergencia, abrían las puertas del convoy y desde fuera golpeaban los vagones.
En otras ocasiones los jóvenes se sentaban delante del convoy de TRAM en las propias vías, de tal forma que obligaban a los maquinistas a frenar para evitar el atropello de los menores.
Otro de los actos vandálicos imputados a la banda juvenil era colgarse de los limpiaparabrisas de la última unidad del convoy ferroviario cuando éste iniciaba la marcha y así se desplazaban varios metros antes de soltarse.
Según la Policía, también amenazaron al personal del TRAM cuando los empleados se dirigían a ellos para que depusieran su actitud vandálica. Maquinistas, revisores y vigilantes de seguridad fueron víctimas de las amenazas de los menores, que alteraron el normal y habitual desarrollo del servicio público.
Las detenciones han ido realizándose de forma paulatina desde hace una semana una vez que los investigadores lograron identificar a los implicados. Los ochos menores detenidos han sido acusados de delitos contra el orden público, amenazas, pertenencia a grupo criminal y una falta de estafa. Los arrestados son cuatro marroquíes, dos españoles, un argelino y un guineano. Todos ellos fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Menores de Alicante.
Identificaciones en San Vicente
A mediados del pasado septiembre seis menores fueron identificados en San Vicente del Raspeig tras ser alertada la Policía Local de la presencia de varios menores gritando y atemorizando a los pasajeros de un tranvía de la línea 2. En el municipio de San Vicente los menores causaron varios altercados al intentar sustraer carteras y teléfonos móviles. También intimidaron a varios ciudadanos que se asustaron al ser rodeados por miembros de la pandilla juvenil.
