Un empresario ha sido absuelto por una jueza de Alicante de una falta de imprudencia leve con resultado de muerte tras el fallecimiento de un trabajador del mármol que fue aplastado por una piedra que cortaba en una cantera de Novelda. De los dos empresarios acusados, la magistrada solo ha condenado a uno de los dos «por su implicación directa en los hechos» y le ha condenado a dos meses de multa con una cuota de 5 euros diarios. Asimismo, la jueza obliga en su sentencia a indemnizar a la familia directa del fallecido con 70.000 euros.

Los dos acusados se sentaron en el banquillo de un juzgado de lo Penal de Alicante por la muerte de un trabajador que cortaba una masa de piedra, y que murió aplastado por dos bloques tras caer desde una altura de 1,6 metros.

La muerte del trabajador, que tenía 23 años y que desempeñaba funciones de oficial de tercera de cantera, se produjo durante la tarde del 27 de agosto de 2003 mientras se encontraba en la Cantera de la Replana manejando la torreta de aire comprimido con el fin de trocear una losa y fraccionar en bloques la masa de mármol. En ese momento, el operario se encontraba en la zona alta de los bloques, en donde el encargado era, precisamente, el padre de la víctima. Cuando el joven introdujo un pinchote para separar la pieza, perdió el equilibrio debido a algún movimiento inesperado y se produjo su caída desde una altura de 1,60 metros, quedando aprisionado desde la cintura hasta los hombros entre dos piezas de mármol. s. ll.