Menos de 24 horas después de atrincherarse en su casa y motivar un espectacular despliegue policial en el barrio San Agustín de Alicante, la Policía Nacional detuvo ayer a este hombre tras protagonizar un nuevo altercado en un supermercado cercano, en el barrio de San Blas, según informaron testigos presenciales y fuentes de la Comisaría de Alicante.

La Policía Nacional le seguía la pista tras el incidente del viernes, en el que se prefirió no asaltar la vivienda y esperar a que saliera para evitar males mayores. Ayer, sobre las 9.00 horas se presentó en un supermercado de la avenida Doctor Rico y empezó a tirar productos de las estanterías al suelo y enfrentarse a los trabajadores en la zona de carnicería. Los agentes, que le seguían la pista para detenerlo por un atentado a la autoridad el día anterior, cuando causó una herida a un policía que requirió dos puntos de sutura en circunstancias no aclaradas, fueron a proceder a su arresto, resistiéndose este hombre, de media edad, nacionalidad colombiana y complexión fuerte. Trató de quitarle la pistola a uno de los agentes sin éxito y al resistirse a la detención causó lesiones leves por contusiones a dos policías. Al lugar se desplazaron media docena de patrullas y finalmente el hombre, tras su arresto, fue trasladado a la unidad psiquiátrica del Hospital General al presentar una alteración de su estado mental que hacía inviable que fuera llevado a los calabozos. Las diligencias serán puestas a disposición judicial para que el juzgado decida el destino de esta persona, que en dos días ha desafiado a las autoridades y obligado a relevantes despliegues policiales en los que tres agentes han resultado lesionados.

El viernes su atrincheramiento obligó a recurrir a más de una treintena de agentes y a un grupo de Geos de Valencia, aunque no llegaron a asaltar la vivienda. La Policía acudió al lugar tras recibir el aviso de que este hombre llevaba armas blancas y quería saltar al vacío desde la terraza de un edificio de San Agustín. Los agentes se retiraron después de varias horas sin que saliera el atrincherado, ya que al parecer se quedó dormido, pero dejando una patrulla para vigilar la zona y detenerlo al día siguiente.