La Policía Nacional ha detenido en Granada por tres robos en viviendas y otro en un establecimiento a un hombre de 37 años con numerosos antecedentes policiales que en uno de los asaltos se quedó dormido en el sofá de la casa a la que accedió, donde fue sorprendido por sus inquilinas.

Otro de los robos que se le atribuye lo cometió en un establecimiento, del que se llevó una máquina registradora con unos 800 euros. Vecinos del local vieron cómo salía del mismo tras cometer el robo y mostraron a los agentes unas fotografías del presunto asaltante saliendo del establecimiento tras cometer el robo. El hombre fue localizado en un albergue municipal por los agentes, a los que manifestó que sabía que iban a por él y les reconoció el robo.