Agentes de la Unidad Canina de la Policía Local de Alicante detuvieron ayer en la estación de autobuses a una persona de 35 años por un presunto delito contra la salud pública y tenencia de estupefacientes.

Los agentes intervinieron una pieza de MDMA (pasta de anfetaminas) con un peso de 1,24 kilos que estaba siendo transportada en autobús desde Almeria, oculta en una maleta con destino a Dénia, para ser trasladada finalmente a Ibiza. Con la droga incautada se podrían fabricar más de 8.000 pastillas de éxtasis, según los datos aportados ayer por la Concejalía de Seguridad Ciudadana de Alicante.

Los hechos ocurrieron poco después de las tres y media de la tarde, cuando los policías, junto con sus canes, se encontraban de servicio en la Estación de Autobuses en uno de los dispositivos que realizan en horarios aleatorios para prevenir el tráfico, consumo y la tenencia de sustancias estupefacientes en Alicante.

Según fuentes policiales el perro «marcó» la bodega de un autobús con ruta Almería-Barcelona. Al proceder a revisar los equipajes, el can detectó algo en una maleta negra. Los agentes hicieron bajar a los viajeros para que cada uno localizase su equipaje y así identificar al dueño de la misma, de nacionalidad española.

Según fuentes policiales, se acompañó a esta persona a un cuarto habilitado para poder hacer un registro de sus pertenencias, lo que permitió localizar en el interior de la maleta una nevera de tela y dos acumuladores de frío, así como una bolsa de plástico con una pasta que, tras ser analizada, fue identificada como MDMA. Se trata de una pasta de anfetaminas, que se utiliza para fabricar pastillas de éxtasis. Por este motivo, los agentes detuvieron al propietario de la maleta.