La Policía Nacional investiga, por si se trata de un caso de violencia machista, la muerte de María Belén Expósito Vázquez, una mujer de 43 años, en A Coruña, que la madrugada de ayer salió despedida de un vehículo en el que viajaba con su pareja, de 46 años, que ha sido detenida y está a la espera de pasar a disposición judicial.

Los hechos fueron presenciados por un agente de la Guardia Civil fuera de servicio, en la glorieta del polígono de Pocomaco, a las 00:30 horas, cuando la mujer, por causas que se desconocen todavía, salió despedida del coche en el que viajaba con su pareja, detallaron a Efe fuentes de la Policía Nacional.

Tanto la víctima como el presunto agresor tienen antecedentes por violencia familiar entre ellos y de género, y podrían sufrir problemas de dependencias, según detallan desde la Delegación del Gobierno.

El agresor tiene además otros antecedentes policiales por violencia de género de anteriores relaciones y, con respecto a la relación con la víctima, constan dos denuncias sobreseídas judicialmente.

Condena de Feijóo

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, hizo ayer un llamamiento a la «racionalidad en el comportamiento de todos» y consideró «lamentable» que en una semana se hayan dado dos muertes por presunta violencia machista en Galicia, unas noticias «espeluznantes».

Tras el Consello de la Xunta, el presidente gallego hizo referencia al último caso de violencia machista, la mujer que falleció en A Coruña y cuya pareja está detenida, y recordó que ya van cuatro víctimas en lo que va de año en Galicia y 23 en toda España.

La Delegación del Gobierno en Galicia expresa la condena absoluta hacia cualquier tipo de violencia, especialmente la que se ejerce contra las mujeres y recuerda la existencia del teléfono 016, que es gratuito y garantiza la confidencialidad de la llamada, ya que no queda registrado en la factura telefónica.

Por otro lado, la presidenta de la asociación Ve-la luz, Gloria Vázquez, denunció que el tratamiento en torno a la violencia machista en Galicia es «surrealista» y una «aberración» porque «se silencian los asesinatos».

Vázquez, responsable de esta organización que vela por la defensa de mujeres y niños supervivientes de la violencia de género y de abusos, añadió que «las mujeres aparecen muertas, no asesinadas, como si se hubieran muerto de gripe».