La Audiencia de Alicante ha condenado a 21 años de cárcel a un acusado de violar a una mujer en su vivienda de Benidorm a la que después encerró, según la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. El fallo impone una pena de 15 años de cárcel por la agresión sexual y otros seis años más por detención ilegal, así como una orden de alejamiento que impide al agresor acercarse a la víctima ni a sus familiares durante 24 años. La sentencia considera probado que el 18 de octubre de 2010 el acusado cuando se encontraba en su domicilio violó a la mujer tras amenazarla con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones, penetrándola vaginal, anal y bucalmente. Después la dejó encerrada en la vivienda, de la que la víctima pudo escapar descolgándose por el balcón al piso de abajo.

En el proceso, acusado y víctima sostenían versiones diametralmente opuestas sobre los hechos y los forenses no habían encontrado lesiones que acreditaran la violación. El acusado señalaba que tenía una relación con la víctima y que solía ir a visitarle dos o tres veces por semana. Según su versión, aquel día no tuvieron relaciones y que la víctima se había enfadado porque le pidió dinero., Él se marchó a comprar dando un portazo y cuando volvió la mujer no estaba.

Sin embargo, la mujer negaba tener relación alguna con él y sostuvo que estaba ese día en la vivienda del acusado tomando un café a quien conocía por ser amigo de su prima. Una vez allí, éste empezó a hablarle de cuestiones sexuales y cuando ella se negó, el otro sacó el cuchillo para violarla. El fallo dice que ella accedió por miedo a perder la vida, lo que explicaría la falta de lesiones. La declaración que ha sido determinante para que la sala creyera a la víctima es el testimonio de la vecina, que la vio descolgarse por la terraza pidiendo ayuda y poniendo en peligro su vida. Según dijo, la mujer estaba muy nerviosa y lloraba, y jamás la había visto en el edificio hasta ese momento.