La Audiencia de Alicante sentó ayer en el banquillo de los acusados a un hombre acusado de haber agarrado del cuello a su expareja durante una discusión por celos en Dénia. Inicialmente la Fiscalía solicitaba una condena por intento de homicidio, pero ayer acabó pidiendo diez meses de prisión y una orden de alejamiento durante dos años. La rebaja se debió al informe de los forenses que señalaron que las lesiones que la víctima sufrió en el cuello eran indicaban que existía una compresión en el cuello de menor intensidad y que, si realmente hubiera existido un intento de estrangulamiento, la víctima hubiera presentado hematomas.

Por su parte, la acusación particular mantuvo su petición de nueve años de prisión por un delito de intento de homicidio. La defensa tildó ayer de «desorbitada» esta petición e incidió en que también el acusado fue agredido por su pareja en la pelea, sin que aún se haya celebrado el correspondiente juicio de faltas por estos hechos. El letrado señaló que la actitud de la víctima tras el incidente no es la de una persona a la que se ha intentado matar, ya que no fue a denunciar hasta el día siguiente porque tenía una cita en el hospital con su hijo