En tiempos de penuria económica, surge todo tipo de picaresca para intentar conseguir ingresos. La Fiscalía ha constatado un aumento de las denuncias falsas cuyo objetivo es el de cobrar el dinero de la compañía aseguradora. Según la memoria, las denuncias falsas se incrementaron en un 22,4 por ciento y pasaron de 49 a 60; mientras que las simulaciones de delitos pasan de 72 a 100, un 38,9 por ciento más. Paralelamente han descendido un 35,4 por ciento las denuncias contra aquellos que mintieron en el juicio, bajando de 99 a 64. Las diligencias por defraudación de fluido eléctrico también han sufrido un considerable aumento, en plena campaña de las compañías eléctricas para erradicar este tipo de hechos y han pasado de 72 a 113.

Por otro lado, la conflictividad social en la calle en plena época de recortes en los servicios públicos también se ha visto reflejada en la memoria de la Fiscalía. Todos los delitos contra el orden público se han incrementado en general un 7,4% y se contabilizaron hasta 407 denuncias durante el año pasado. En su mayoría, estas infracciones han consistido en resistencia o atentado a los agentes de la autoridad.

Los delitos contra la seguridad vial son otro de los apartados que registran un aumento en la estadística judicial y se incrementan un 2,5 por ciento en conjunto, sumando hasta 1.179 casos. Así se contabilizaron 814 denuncias por conducir bajo la influencia de alcohol y drogas; 241 por conducir sin carné; y otras 110 por conducción temeraria.