El titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Santiago de Compostela, Luis Aláez, pidió ayer al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) que informe sobre el estado de las vías y peraltes en la zona del accidente ferroviario, así como las señales y balizas físicas y luminosas en el trayecto Orense-Santiago.

El juez que lleva la investigación sobre el accidente ferroviario también ha requerido a Adif otros datos técnicos como el radio de la curva de A Grandeira, donde el Alvia descarriló. Según el Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSJG), el juez también solicitó a Renfe diferente documentación consistente en información sobre la vida laboral del maquinista Francisco José Garzón. Dentro de esta información, el juez quiere conocer los resultados de los controles de tóxicos realizados en los últimos años por la empresa de pruebas de condiciones psicofísicas, bajas, experiencia en el trayecto donde se produjo el siniestro, cursos y demás en relación al conductor del tren siniestrado.

Luis Aláez también quiere saber la hora a la que comenzó la jornada el día del accidente y el tiempo efectivo que condujo. Además, ha pedido información del contenido de las cajas negras de otros trenes que hayan realizado el mismo recorrido, documentos sobre velocidades en la línea, sobre la máquina y sobre normativa de personal en cabina.

En relación a los móviles del maquinista se ha pedido a las respectivas compañías telefónicas información sobre llamadas entrantes y salientes y los servicios de mensajería tanto de su móvil personal como del profesional, que estaba siendo buscado porque se había extraviado en el accidente.

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acordó hoy la apertura de una oficina de atención a las víctimas del accidente que se encargará de todos los trámites judiciales. Asimismo se aprobó un juez de refuerzo para el juzgado que investiga los hechos.