El juicio por el presunto asesinato de un holandés, que apareció estrangulado en su domicilio, quedó ayer visto para sentencia con los informes finales de las partes. La Fiscalía mantuvo la petición de penas que suman cerca de 50 años de cárcel para los dos acusados de ser los autores materiales del crimen y sus dos presuntos colaboradores, mientras que las defensas, entre los que se encuentran los letrados Fernando Crespo y Mariana Ivanov, alertaron de que los verdaderos asesinos están libres y que sus representados son inocentes. El hombre murió el 25 de julio de 2009 en su domicilio de Dénia. La desaparición de uno de los cinco juegos de llaves del domicilio de la víctima y un sobre con 4.500 euros que éste acababa de recibir, aunque los ladrones no llegaron a encontrar, fueron los pilares en los que se ha basado la investigación. Uno de los acusados aprovechó su turno de última palabra para decir que era inocente y que había pasado tres años en la cárcel por algo que no había cometido. Sin embargo, la Audiencia Nacional tiene órdenes de extradición contra ellos por supuestos delitos cometidos en su país