La Policía Nacional de Elche ha desmantelado en San Isidro y Albatera un grupo organizado que se dedicaba presuntamente al tráfico de drogas a pequeñas y mediana escala y se ha incautado de 12 kilos de cocaína y más de 500 papelinas de la misma droga que estaban ya preparadas para su venta al consumidor en la Vega Baja, según informaron ayer fuentes policiales. En la operación fueron detenidas ocho personas de un clan familiar y todas ellas han ingresado en prisión tras pasar a disposición del juzgado de guardia de Orihuela.

La investigación fue iniciada hace tres meses por el Grupo de Estupefacientes de la Policía Judicial de la Comisaría de Elche. Los agentes averiguaron que un clan familiar afincado en varios municipios de la Vega Baja se estaba dedicando a vender droga tanto al menudeo como a mediana escala con cantidades más importantes de cocaína.

Los agentes antidroga comenzaron a realizar gestiones e investigaciones sobre los miembros del clan con el fin de identificar a todos los implicados en la red de tráfico de estupefacientes.

Identificados

Una vez identificaron a los sospechosos la Policía solicitó al juzgado mandamientos de entrada y registro y procedió a la detención de ocho personas, dos mujeres y seis hombres, en San Isidro y Albatera.

La Policía registró seis viviendas en San Isidro, una en Albatera y tres en Crevillent. El balance fue positivo porque se incautaron de unos doce kilogramos de cocaína, más de 500 papelinas de coca ya elaboradas, una pistola, una taser de descargas eléctricas, dos vehículos, 8.000 euros y diversos útiles para la elaboración y manipulación de sustancias estupefacientes.

Los ocho detenidos, de entre 22 y 56 años, cuentan con antecedentes policiales. Los apresados fueron trasladados a dependencias de la Policía Nacional para prestar declaración y una vez concluyeron las diligencias fueron puestos a disposición del juzgado de Instrucción número 1 de Orihuela, que decretó prisión preventiva para todos ellos.

La Policía Nacional considera que con la desarticulación de este grupo se ha cortado una importante vía de distribución de cocaína a pequeña y mediana escala en la comarca de la Vega Baja y ciudades limítrofes.