El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ha recuperado cuatro vasijas cerámicas del siglo XV que fueron robadas en octubre de 2005 del Palacio de Medinaceli de Geldo (Castellón). Así lo dieron a conocer ayer el teniente coronel jefe de la Comandancia de Castellón, Juan José Miralles y el subdelegado del Gobierno en Castellón, David Barelles, quienes explicaron que las piezas tienen un valor patrimonial calculado en varios miles de euros.

La Benemérita ha conseguido identificar a doce personas relacionadas con toda la cadena de compraventa de las piezas desde que fueran sustraídas pero sobre ellas no recae ninguna imputación ya que los delitos de robo con fuerza en las cosas y de receptación prescriben a los cinco años.

Las vasijas fueron recuperadas una en Barcelona, otra en Alicante y las dos restantes en Castellón y estaban en posesión de coleccionistas privados. Asimismo, el teniente coronel añadió que algunas de las piezas han llegado a pasar hasta por cuatro propietarios distintos.

La "compleja" investigación se inició a raíz de una denuncia interpuesta en el cuartel de Segorbe en la que se informaba de la desaparición de varias vasijas que se encontraban en el Palacio de Medinaceli de Geldo, que en aquel entonces estaba en proceso de restauración. La Policía Judicial y el Seprona se puso en contacto con los técnicos de la Unidad de Inspección de Patrimonio Cultural Valenciano a través de los cuales averiguaron que las vasijas podrían estar en colecciones particulares de anticuarios.

A partir de ese momento, la Guardia Civil empezó a informar a técnicos y especialistas para que les avisaran en el caso de que vieran alguna pieza de estas características. Finalmente, los agentes acudieron a las localidades de Alicante y Barcelona donde visitaron a dos de los coleccionistas privados que podrían tener las piezas y confirmaron las informaciones recibidas por los peritos arqueológicos: en dichas colecciones estaban dos de las vasijas.

La primera de las piezas que se localizó estaba en Barcelona e, investigando la procedencia, se logró llegar a las piezas restantes en Alicante y Sagunto (Valencia). En esta localidad, el anticuario poseía, en su colección particular, dos vasijas, una de ellas de cuatro asas y con una decoración pintada de manganeso, una pieza única de gran valor patrimonial.

Los propietarios colaboraron con la Guardia Civil y facilitaron toda la información requerida como que habían comprado dichas vasijas al anticuario de Sagunto quien, a su vez, manifestó habérsela comprado a los trabajadores de una empresa de reformas que se las ofrecieron. La recuperación física se efectuó entre los meses de enero y febrero.

Según explicó Miralles, la primera venta se hizo en 2006, un año después de que fueran sustraídas, y cada vasija fue a parar varios puntos de España a través de las diferentes compras y ventas que hacía los coleccionistas. El teniente coronel destacó que fue una venta "fácil" ya que la gente que se dedica a las antigüedades conoce la importancia patrimonial de estas piezas. Las vasijas recuperadas fueron entregadas ayer por el teniente coronel y el subdelegado del Gobierno al director del Museo de Bellas Artes de Castellón, Ferran Olucha, para someterlas a un proceso de restauración y exponerlas. Posteriormente se trasladarán a su lugar original de procedencia, el Palacio de Medinaceli de Geldo. Según el arqueólogo Enric Flors, quien trabajó en la restauración del palacio, detalló que se trata de unas vasijas datadas en el siglo XV procedentes del único taller que por aquella época había en las inmediaciones de Segorbe.