Ofrecían en internet teléfonos móviles de última generación a precios atractivos y en los paquetes que enviaron a compradores de varias provincias metieron dentro un pepino, un tomate, una pastilla de jabón o una patata ya florecida. El fraude ha sido frenado por la Guardia Civil al descubrir y detener en Guardamar a una pareja por la presunta estafa. La investigación se inició el pasado mes de septiembre tras constatar que se habían presentado denuncias en varias provincias con un denominador común que era un apartado de correos en Guardamar del Segura.
Las pesquisas revelaron que la titular del apartado de correos era una mujer con domicilio en Gandía, sin que apareciera inicialmente ninguna vinculación con Guardamar. Sin embargo, descubrieron que la mujer pasaba cortos periodos de tiempo en Guardamar, donde contaba con un presunto cómplice. Una vez identificados fueron detenidos el pasado miércoles.
Los detenidos ofrecían móviles en páginas web y utilizaban hasta cinco seudónimos y direcciones de correo diferentes. Los teléfonos eran de última generación y los precios ofertados no eran excesivamente bajos -unos 300 euros- para no levantar sospechas. Colgaban fotos de los terminales reales y mandaban los paquetes contrarreembolso, pero con verduras u hortalizas.
Por ahora hay denuncias en Villanueva de la Reina y Linares (Jaén), Almendralejo (Badajoz), Mairena de Aljarafe y Trina (Sevilla), Mataró (Barcelona) y Victoria de Acentejo (Tenerife).
