Hubieran muerto aunque las puñaladas se hubieran producido en la puerta del hospital. Los forenses confirmaron ayer en el juicio que las dos prostitutas muertas a cuchilladas por un joven en Benissa presentaban heridas mortales, muy cerca del corazón, y que les causaron una hemorragia masiva que terminó con su muerte. Los forenses certificaron que las dos mujeres sufrieron múltiples puñaladas en un periodo muy corto de tiempo y mientras estaban en movimiento, sin poder precisar cuál fue el orden de éstas. Los médicos certificaron que las dos víctimas tenían heridas en los brazos y en las manos, lo que indica que éstas habrían tratado de defenderse. Una de las fallecidas recibió 17 puñaladas y la otra seis.
El juicio por este doble homicidio que juzga esta semana un jurado popular en la Audiencia de Alicante entró ayer en su recta final con los informes periciales. Hoy está previsto que las partes presenten sus informes finales y después el jurado se retirará a deliberar, aunque la Fiscalía ya adelantó que mantendría su petición de 24 años de cárcel por dos delitos de homicidio. La acusación particular pedirá al jurado una condena por dos asesinatos.
Los peritos confirmaron que el acusado había tomado cocaína esa noche, aunque descartaron que este consumo de droga afectara a sus facultades. Según los forenses, era consciente de lo que hacía e incluso llegó a manifestar a uno de los médicos que no pretendía esconderse de lo que había hecho en el consumo de cocaína.
