Una fiscal solicitó ayer al acabar el juicio la condena de dos jóvenes acusados de intentar matar a una conductora con la que tuvieron un incidente de tráfico tras perseguirla durante diez minutos por la pista de Ademuz. La víctima explicó que los acusados lograron echarla de la carretera tras darle varios golpes y la agredieron brutalmente con una barra de hierro. La mujer llamó al 112 para pedir ayuda y toda la agresión quedó registrada. Los dos imputados negaron su participación en los hechos, pero uno de ellos no pudo explicar cómo llegó a sus manos el teléfono de la víctima que fue recuperado unos días después.

El momento más duro del juicio fue cuando la sala escuchó la grabación del teléfono de emergencias. "¿112? Por favor, me van a matar. ¡Ay Dios, qué miedo tengo!", recoge la grabación. Uno de los acusados le preguntó al otro si había matado a la víctima. La mujer detalló al tribunal cómo fue la persecución y admitió que no puede identificar a los dos autores de la agresión porque estaba muy oscuro.

Los hechos ocurrieron sobre las dos de la madrugada del 21 de mayo en la CV-35 a la altura de la Pobla de Vallbona. En un momento determinado, los acusados hicieron una maniobra brusca lo que hizo que la víctima tocara el claxon. Los procesados empezaron a hostigar a la mujer, realizaron varias maniobras bruscas de adelantamiento y se cruzaron con ella. La denunciante explicó que el vehículo de los procesados le arrancó el espejo retrovisor y que finalmente perdió el control del coche tras recibir un golpe por detrás. "Al principio pensé que jugaban conmigo, pero cada vez estaban más agresivos. Llamé al 112 porque temí por mi vida. El copiloto me iba chillando", lamentó.

La denunciante añadió que le agredieron dos personas, pero insistió en que no las podía identificar. "Rompieron mi ventanilla y yo me agarré muy fuerte al volante. Me dieron un golpe muy fuerte con algo metálico", explicó al tribunal.

Como los acusados no pudieron sacarla del coche, uno de ellos la volvió a coger del pelo y la golpeó varias veces contra el volante. Uno de los agresores, según explicó la mujer, le retorció la mano y le quitó su teléfono móvil que seguía conectado al 112. Emergencias grabó la conversación que mantuvieron y en la que se puede escuchar cómo uno de ellos preguntaba si estaba muerta.

"Acababa de salir de la cárcel"

El acusado que presuntamente iba como copiloto aseguró al tribunal que no recordaba lo sucedido porque iba drogado e insistió en que él no se bajó del coche. "Estaba fumando droga y no sé si era de día o de noche. Estaba en otro planeta. Yo lo único que pensé es que acababa de salir de la cárcel y me había buscado la ruina. Yo nunca he cometido delitos violentos, sólo robos. Vi a Jonathan -el otro acusado- ensangrentado y me asusté", indicó. El otro procesado aseguró que él no conducía el coche y mantuvo que tampoco bajó. Los hechos quedaron vistos para sentencia.