El Juzgado Contencioso-Administrativo número uno de Vigo ordena que se indemnice con 60.000 euros a un paciente por el daño moral sufrido tras un diagnóstico erróneo de VIH y hepatitis B, que se mantuvo 15 años. El denunciante reclamaba 400.000 porque, como resultado del error, "su vida personal, social y laboral se desmoronó".

Tal y como recoge la sentencia, el paciente sufrió en el 2000 -con 32 años- una herida en la pierna derecha por una caída. Al darle el alta en Povisa, le informaron por escrito que padecía VIH y hepatitis B.

A raíz de esto, como recoge la demanda, su esposa se separó de él; también se cortó la relación con su hija por miedo a que la contagiara; tiene un nieto al que apenas conoce; perdió la relación con hermanos y sobrinos; sufrió una fuerte depresión, con tres intentos de suicidio; recayó en el consumo de estupefacientes; y, "unido a lo que él creía una corta esperanza de vida, hizo que comenzase una espiral delictiva" que le llevó a prisión en 2002.

El error se "dilató innecesaria y dolorosamente en el tiempo" hasta 2015, ya que le hicieron analíticas en 2005, 2007, 2012 y 2014 "y ni se corrigió documentalmente ni se comunicó al interesado".

Sanidade reconoció un "claro error de diagnóstico" y le concedió 19.172 euros. El juez sube a 60.000 euros la indemnización, que habrá de ser abonada por el centro. Cabe recurso.