Hoy es San Valentín y uno no puede dejar de replantearse qué hacer para que el amor sea eterno y no se apague la chispa. Más allá de los ramos de flores o de los poemas propios de un día como hoy, éste es el decálogo fundamental que, según la sexóloga y experta en terapias de pareja Nayara Malnero, se necesita para que el amor se mantenga. Apunten y no pierdan el tiempo.

  1. Los polos opuestos no se atraen. Es una de las grandes mentiras del amor y de las que más se repiten. Lo polos opuestos pueden atraerse, sí, pero luego no funcionan como pareja. Si a uno le gustan los deportes de riegos y al otro ver pelis en el sofá, mal asunto. Cuanto más parecidas sean las personas de la pareja, mejor.
  2. Negociación y comunicación. ¿Cariño, a ti te gusta celebrar San Valentín? Di la verdad. Puede que te encante que te sorprendan o te lleven a cenar o, por el contrario, que te parezca una de las fiestas más ridículas del año. Pero lo que hay que hacer, por la buena marcha del negocio, es ser sincero y no pretender que el otro nos lea la mente. Comunicación, por favor.
  3. Un buen sexo. Lo que diferencia a dos buenos amigos de una pareja es precisamente que la pareja tiene sexo. Las relaciones sexuales son la base para que una pareja funcione y hay que molestarse en saber qué es lo que le gusta al otro y pasarlo bien los dos. Luego lo de la frecuencia, la postura y los fetiches ya son cosas que dependen de cada caso Pero no hay amor sin sexo.
  4. Compartir tiempo de calidad. Tú a la playa y yo a la montaña... No. Si queremos que una pareja funcione, ambos tienen que programar tiempo juntos y disfrutar de ello. No vale compartir una siesta en el sofá o los viajes en el coche. No. Hay que pensar en planes amenos y divertidos para los dos.
  5. Proyectos de futuro en común. Es muy importante que la visión de futuro sea común, temas como tener hijos, comprarse una casa, asentar la relación o incluso tener una mascota son cosas que hay que tratar y cuanto antes mejor. Si ella quiere hijos y él no o viceversa será complicado que el amor dure. La visión y los planes de futuro tienen que ir por el mismo camino.
  6. Capacidad de compromiso. Contigo pan y cebolla y hasta que la muerte nos separe. No hay que tener miedo al compromiso con la persona que amas, es uno de los pilares que asientan una relación de amor sana y duradera. Si no hay compromiso, ¿para qué perder el tiempo?
  7. Buena gestión de las familias políticas. No soporto a mi cuñada... Vale, pero no lo digas en voz alta. Dientes, dientes, como la Pantoja. Es importantísimo que haya buen rollo entre las familias políticas porque a cada uno le duelen los suyos. Intentar que no haya conflictos en Navidad o no protestar si el pavo de la suegra no está tan exquisito como el que prepara tu madre.
  8. Equidad. Los tiempos en los que la mujer ponía al hombre el plato en la mesa y él no movía ni un pelo ya han pasado. Y menos mal. Es importante colaborar en casa, hacer un reparto de tareas y que los dos miembros de la pareja se encarguen de las labores del hogar.
  9. Volver al principio. ¿Te acuerdas cuando nos conocimos y me llevaste a cenar a aquel chiringuito de la playa? No lo recuerdes, hazlo. Romper con la monotonía que traen los años es tan fácil como volver a hacer esos planes del principio, cuando las emociones estaban a flor de piel y volaban las mariposas en el estómago. Si cualquier tiempo pasado fue mejor, repite experiencia.
  10. Fidelidad, no siempre. Lo importante es la lealtad, pero la fidelidad no tiene por qué ser algo obligatorio en una pareja. Como explica Nayara Malnero, "hay parejas que duran toda la vida y no creen en la fidelidad, lo importante es respetar las reglas que se han consensuado en pareja". Los compromisos adquiridos son lo que importa.