La historia del automóvil tiene una cita hoy en Vigo. El grupo PSA Peugeot Citroën ha elegido la ciudad como punto de partida de la primera prueba en España de un vehículo autónomo (capaz de circular sin la interacción del conductor), que recorrerá los casi 600 kilómetros que separan las plantas de Vigo y Villaverde (Madrid). En el primer tramo del viaje, entre Balaídos y el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG) en Porriño, el coche autónomo (uno de los cuatro prototipos de C4 Picasso fabricados en Vigo que posee la multinacional francesa) será testado por el director del polo ibérico de PSA, Yann Martin, y el director Industrial y de Supply Chain del consorcio, el vigués Juan Antonio Muñoz Codina, y en el segundo trayecto, entre Porriño y A Cañiza, lo harán el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Economía, Traballo e Industria, Francisco Conde. Ya por la tarde, en la factoría de Madrid, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, acudirá a la recepción del vehículo.

PSA es el primer fabricante en hacer uso de la nueva reglamentación elaborada por la Dirección General de Tráfico (DGT) para probar tecnologías de conducción automatizada por carreteras abiertas, en vigor desde hace una semana. El prototipo que saldrá de Vigo solo está adaptado para circular por autovías y autopistas (viales que tengan los dos sentidos de circulación separados por una medianera) y es similar al vehículo que a principios de octubre cubrió el trayecto París-Burdeos (580 kilómetros) en modo autónomo con motivo de la celebración de un importante congreso sobre sistemas inteligentes de transporte. La elección de Vigo para la salida de esta segunda prueba de larga distancia se enmarca en la alianza tecnológica que el grupo PSA Peugeot Citroën tiene con el CTAG, que está aportando su experiencia para el desarrollo de soluciones que optimicen la interacción entre el conductor y el coche (Human Machine Interface).

El vehículo que saldrá esta mañana de Balaídos está equipado con todo tipo de sensores, radares, sistemas láser y de comunicación, cámaras y dispositivos de ultrasonidos para monitorizar en tiempo real todo lo que sucede a su alrededor y adaptar la conducción a las circunstancias. El prototipo es capaz de controlar la velocidad, los cambios de carril y adelantamientos en autopistas, autovías y vías rápidas. A bordo viajarán varios ingenieros para examinar el funcionamiento de los equipos, en particular una cartografía con los datos registrados de la ruta y unos detectores láser y radar para recibir información en tiempo real sobre la carretera y el tráfico. El propio Carlos Tavares, presidente de PSA Peugeot Citroën, testó uno de estos prototipos en las proximidades de Vélizy, donde PSA tiene su principal centro de investigación, como ya avanzó FARO.

Galicia participa en este proyecto pionero con el CTAG, a través del programa Mobile Lab, suscrito el año pasado con la dirección de Investigación, Innovación y Tecnologías Avanzadas de PSA Peugeot Citroën. La aportación gallega en el proyecto se centra en el campo del HMI, en cómo interactúa el conductor con el vehículo en los diferentes escenarios de conducción automatizada (por ejemplo, a través de enlaces multimedia: imágenes, sonidos, vibraciones, etc.). Los complejos de investigación del grupo PSA en Vélizy y Sochaux (Francia), por su parte, se han encargado del desarrollo de los sistemas de asistencia avanzada a la conducción (ADAS & AD).

El CTAG lleva años innovando en el campo de la conducción automatizada, y algunos de los avances en los que ha trabajado ya se encuentran en el mercado, como el control de crucero adaptativo (ACC), el frenado de emergencia (AEB) o los sistemas de ayuda al estacionamiento (Park Assist). Y otros se están probando en los prototipos que ha configurado PSA, como el Traffic Jam Assist, con el que el vehículo se mueve de forma autónoma en retenciones y atascos; el asistente para intersecciones (Intersection Assistance) que detecta de la presencia de otros coches antes de entrar en un cruce y la conducción autónoma en tramos de autopista, entre otros. Los plazos que maneja el sector para la llegada de esta tecnología a la carretera difieren entre fabricantes, aunque los primeros ejemplos se verán ya a partir de 2018.