El presidente de la Asociación Española de la Industria Eléctrica (Unesa), Eduardo Montes, ha instado a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, a que su administración muestre "con aquellos que están pasándolo mal" la misma "solidaridad" que exige a las compañías eléctricas.

En declaraciones a EFE, Montes ha lamentado las declaraciones en las que la alcaldesa recriminaba hoy a estas empresas su "ansiedad" por cobrar, pese a sus grandes beneficios, y su falta de solidaridad por "amenazar" a las instituciones con el corte del suministro si se retrasan en el pago.

El presidente de la patronal eléctrica se ha mostrado sorprendido por unas declaraciones que, pese a venir de "una alcaldesa modelo", han sentado "muy mal" en el sector.

Montes opina que Barberá "no puede criticar a las eléctricas por hacer lo que hace cualquier administración", máxime cuando el propio Ayuntamiento de Valencia ha dictado embargos por el impago de multas a conductores.

El representante de las eléctricas ha recordado que el consistorio valenciano embarga cuentas corrientes, bienes inmuebles, salarios, joyas e incluso la devolución de la renta de Hacienda por "aparcar en doble fila".

"¿Cómo puede criticar a una compañía privada que tiene el mismo afán recaudatorio que su ayuntamiento?", se ha preguntado Montés.

A su juicio, y de acuerdo con las manifestaciones de la alcaldesa, "cuando haya una deuda que cobrar, el Ayuntamiento también debería mostrar solidaridad con aquellos que están pasándolo mal".

Montes también ha criticado que Barberá realice estas afirmaciones "sin saber lo que gana o no" la compañía responsable del suministro en la luz de Presidencia de la Generalitat, especialmente por tratarse de una empresa que "genera empleo".

El presidente de la patronal ha recordado que "la realidad es que cuando un cliente debe un pago, los sistemas contables mandan un aviso", ya se trate de un particular o de una administración.

"Un ayuntamiento que está embargando hasta cuentas corrientes no puede quejarse", ha recalcado Montes, cuando las compañías eléctricas siguen este "procedimiento habitual" tras un impago.