La lluvia de perseidas o "las lágrimas de San Lorenzo" con la que el cielo nos obsequiará esta noche es una de las más populares: el calor, las vacaciones y el tiempo para el ocio hacen que mucha gente pueda disfrutarla pero ¿Qué hay que hacer para ello?

Según explica Lydia Freire, presidenta de la Asociación para el Estudio y la Divulgación de la Astronomía en Alicante (AEDAA) , "lo mejor es buscar zonas altas, mejor en la montaña, alejadas de los núcleos urbanos y de la contaminación lumínica". Este año la luna llena puede dificultar la visibilidad de las perseidas, pero "podrán verse igualmente", afirma Freire.

Como recomendación hay que añadir la necesidad de llevarse abrigo, porque aunque haga calor en las zonas de montaña el fresco de la madrugada puede hacernos pasar un rato desagradable. "Lo mejor es llevarse algo de abrigo y una hamaca" para poder tumbarse a contemplar las estrellas, explica Freire.

Hay que añadir, que contra lo que mucha gente cree, "la playa no es un lugar bueno para ver la lluvia de estrellas ya que la humedad y la contaminación lumínica lo hacen muy difícil".

La Asociación para el Estudio y la Divulgación de la Astronomía en Alicante las verá en Beneixama, en el Albergue de Rita, desde donde tienen previsto hacer un conteo científico.

¿Hacia dónde hay que mirar?

Hay que posar los ojos en la constelación de Perseo, que representa al héroe mitológico que decapitó a Medusa. Está formada por cinco estrellas y hay que mirar al noroeste para dar con ella. Las perseidas reciben su nombre porque parece que salen de esta constelación.

No hace falta telescopio, es mejor observarlas de forma natural y las habrá durante toda la noche, aunque la presidenta de AEDDA recomienda el periodo de tiempo entre las tres y las ocho de la mañana, horas en las que hay picos.

¿Qué son las perseidas?

Las perseidas son restos que dejan los cometas en estela cuando se queman y cruzan el espacio terrestre. Los cometas, según explica Lydia Freire, son "bolas de nieve sucia" que contienen polvo y gas y que describen una órbita muy larga. Cuando pasan cerca del sol se deshace la parte exterior y el cometa sigue su órbita, quedándose parte de los restos como una estela que se queman y brillan al pasar por la atmósfera de la tierra.

En agosto, la Tierra atraviesa la órbita del cometa Swift-Tuttle y es por eso que la lluvia de estrellas se intensifica esta noche "aunque realmente las hay todas las noches, pero no tienen la misma visibilidad", explica Freire.