El beneficio que encuentran algunos emprendedores en el mundo de los medios digitales, muchas veces, más que monetario es espiritual. Es decir, encuentran un camino que les permite ser más libres a la hora de decir lo que quieren y como quieren.

Es el caso de Gema Moreno, a la que tras varios años trabajando en radio y televisión "se le fue la pinza", como ella misma indica, y lo dejó todo para impulsar el proyecto de su vida: recuperar la radio de los años 50.

"Esa radio en la que el programa era un espectáculo en sí: con actuaciones y público en directo, gags, etcétera. Para dar fe de todo ese show necesitábamos que se grabaran los programas y que se realizaran en un plató. Contactamos con Ciudad de la Luz y nos apoyan dejándonos el plató del Centro de Estudios y ofreciéndonos la posibilidad de que sus estudiantes nos apoyaran con la parte audiovisual".

Todos esos vídeos, e incluso los programas de podcast los cuelgan en su web: www.masespectaculo.com. Incluso ya la tienen preparada para poder emitir con señal de vídeo en tiempo real. Además, están asociados con casi un centenar de emisoras locales de toda España que ofrecen a sus oyentes este espectáculo cultural.

Lo único que les falta, de momento, es dinero. Actualmente son una plantilla de 11 personas, entre maquilladores, técnicos, gestores webs, locutores.... Confían en conseguir la publicidad necesaria para poder mantener el proyecto y retratar la vida cultural y artística de Alicante.

Esta táctica de financiación se diferencia de la de Bottup, uno de los primeros periódicos ciudadanos creados en España. El alicantino Pau Llop y Christian González, padres del proyecto, para alejarse del actual modelo de subsistencia del resto de medios, que según ellos, puede condicionar su contenido, buscan autogestionarse de manera similar a la organizaciones no gubernamentales: mediante subvenciones o donaciones de fundaciones.

Recientemente han sido seleccionados por la Fundación Internacional Ashoka para recibir su apoyo como emprendedores sociales. Y es que, en un primer momento, montaron Bottup sin ningún ánimo de lucro, sin entender el periodismo como negocio.

Ahora, gracias a la aportación de esta fundación, Llop podrá trabajar desde una oficina compartida y ganar el sueldo necesario como para poder dedicarse íntegramente al periódico, sin necesidad de combinarlo con otros trabajos como freelance. Para él, Bottup es una red social de ciudadanos, compuesta por cerca de 1.200 redactores. "Es necesario especificar que no nos limitamos a publicar lo que nos envía la gente. Todas las informaciones que nos mandan la contrastamos, la corregimos y la adaptamos a un lenguaje periodístico. Convertimos información amateur en profesional. Creemos en el periodismo ciudadano pero también en el periodismo profesional", destaca.

En Bottup, que por supuesto sólo tiene soporte digital, el lector se encuentra ante una agenda diferente. "Las secciones las marcan los intereses de la gente. Por ejemplo, tenemos ciudadanía, cambio climático, vivienda, denuncia... Somos un medio totalmente adaptado al 2.0, a compartir y recibir información de manera libre, sin barreras". PROFESIONALESPROFESIONALES DEL CIBERESPACIOLA WEB NO DEJA DE CALENTARSEBITESBITES POR LADRILLOSJUGAR A GANAR DINEROPERIODISMO 2.0