Toscani, conocido por sus campañas publicitarias para la marca de ropa italiana "Benetton", afirma que el padre Eluana, Giuseppe Englaro, se equivocó en su "estrategia de comunicación" por haber difundido una foto de su hija previa al accidente y también niega haberle ofrecido dinero por fotografiarla.
Las imágenes difundidas por la familia de Eluana mostraban a una joven de 21 años sonriendo a la cámara, pero la mujer murió con 38 años y afectada por las consecuencias de su prolongado estado vegetativo.
Toscani cree que era necesario ver "cómo se había transformado", ya que la foto difundida por los medios era una "instrumentalización".
A su juicio, es como si se mostraran fotos de los judíos de Auschwitz "antes de su entrada en los campos de concentración".
El publicista apunta que se había comunicado un "equívoco" a la opinión pública con la publicación de esa fotografía, que provocó que mucha gente creyera que Eluana era "todavía esa bella chica llena de vida".
El artista italiano dice que existe una "belleza de la tragedia" y que el gran arte está lleno de imágenes de este tipo.
A su juicio, hace falta documentar esa realidad que, gracias a la tecnología, mantiene "intubados en los hospitales" a los muertos en vez de en el cementerio.
Eluana Englaro murió el pasado lunes, tres días después de que se interrumpiera su alimentación e hidratación, una decisión avalada por el Tribunal Supremo italiano pero rechazada por el gobierno del primer ministro, Silvio Berlusconi.
La lucha legal entre la familia Englaro y las fuerzas contrarias a todas formas de eutanasia causó una gran polémica en Italia, con manifestaciones en varias ciudades del país.
