Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Una peligrosa relajación en la batalla contra el transfuguismo

El episodio que se ha vivido esta semana en el Ayuntamiento de San Fulgencio con la operación del PP para formar un gobierno junto a cinco tránsfugas es sólo una evidencia más, la última hasta ahora, de la peligrosa relajación que se ha extendido durante este mandato en la lucha contra una anomalía democrática de la que se beneficiaron, especialmente, populares y socialistas durante años y años. Un mal que luego se arrinconó con reformas legales. Pero que, finalmente, durante estos últimos tres años, ha vuelto a colocarse en el centro de la escena política alicantina. La primera tránsfuga de este mandato fue Covadonga Peremarch, diputada por Alicante en las Cortes a propuesta de Podemos antes de llevarse el escaño. Las dos principales instituciones provinciales -la Diputación y el Ayuntamiento de Alicante- están condicionadas en beneficio del PP por el voto de dos tránsfugas: Fernando Sepulcre y Nerea Belmonte, elegidos en su día, respectivamente en las listas de Cs y de una marca aliada también de Podemos. Y ahora, para colmo, es el propio PP el que quiere formar un gobierno con otros 5 tránsfugas expulsados de sus propias filas en San Fulgencio. De nota. Peligrosa deriva que se debe frenar.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats