Las discrepancias técnicas siguen bloqueando, y hasta el último momento, la adjudicación del contrato de 8 millones -licitado por 15 millones incluyendo las prórrogas- a FCC en la Diputación de Alicante por la limpieza de los edificios públicos. La propuesta de adjudicación a favor de FCC realizada por el técnico que lidera la valoración no ha sido ratificada por la mesa de contratación, donde uno de sus miembros ha impedido su materialización. Se trata, concretamente, del presidente de la mesa, a su vez, jefe de Contratación en la institución alicantina.
La millonaria contrata de la limpieza en la Diputación de Alicante y de sus organismos autónomos estaba a punto de cambiar de titular en el próximo pleno ordinario tras ocho años en manos de Enrique Ortiz. El pleno que se celebrará el miércoles de la semana que viene iba a incluir el cambio de adjudicataria, pero no será así porque la propuesta todavía no está clara y ha quedado sobre la mesa de la comisión de Hacienda celebrada esta mañana al entender, incluso el PP, que todo estaba un poco liado.
Y es que el jefe de contratación de la institución, presidente de la mesa que avala la propuesta presentada previamente por otro funcionario, lleva meses diciendo que no a la propuesta de FCC. Hasta tal punto han llegado las discrepancias entre la mesa y el funcionario que realiza la propuesta de adjudicación, que intentaron que el departamento legal de la Diputación emitiera un informe para llegar a un acuerdo.
Los servicios jurídicos respaldaron la adjudicación a FCC, pero el presidenta de la mesa entiende que no tienen competencias en esta decisión. Así que la Comisón de Hacienda ha dejado sobre la mesa la adjudicación del millonario contrato de la limpieza, que en en fondo, sigue beneficiando a Ortiz, que mantiene su cabeza en la institución provincial. El empresario llegó a la Diputación de Alicante para hacerse con el servicio de limpieza de edificios publicos en el año 2001 bajo el mandato de Julio de España, según ha concretado el diputado de Hacienda Eduardo Morán.
El empresario llegó a la Diputación de Alicante para hacerse con el servicio de limpieza de edificios publicos en el año 2001 bajo el mandato de Julio de España, según puntualizó el diputado de Hacienda, Alejandro Morant.
La adjudicación de la limpieza de los edificios públicos de la Diputación llevaba enquistada un año. El millonario contrato salió a licitación en abril del año pasado por 9,1 millones de euros para dos años y teniendo en cuenta las prórrogas alcanzaría los 15 millones de euros. Sin embargo, las discrepancias técnicas para su adjudicación han tenido bloqueada la nueva contrata hasta ahora, cuando se creía resuelta. Pero no hay manera, y Enrique Ortiz seguirá teniendo, de momento, el contrato en su poder ante la falta de acuerdo para poder elevar la propuesta al pleno.
La sesión plenaria se había aplazado una semana, pero finalmente se ha reconducido a su calendario natural: el primer miércoles de cada mes.
