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Bonig marca los tiempos y evita pedir cabezas al PSPV y Bloc por la financiación

Una década lleva el Partido Popular convertido en blanco de las críticas de PSPV y Compromís por sus continuados casos de corrupción. Más de nueve años, desde febrero de 2009 cuando estalló el caso Gürtel, en los que los juicios por corrupción se han ido acumulando en la bancada popular, muchos de ellos hoy con condena firme y otros en espera de resolución. Ya casi una década en la que los contenciosos judiciales de dirigentes populares han estado en el eje del discurso de los partidos de izquierda, en la oposición hasta 2015 y ahora en la Generalitat. Ayer, por primera vez en estos años, los populares se enfrentaban en las Corts a un cara a cara con el jefe del Consell, Ximo Puig, con la situación cambiada. Ahora son el PSPV y el Bloc (el partido mayoritario en Compromís) los que tienen abierta una investigación judicial por una presunta financiación ilegal en la campaña electoral de 2007, la misma sobre la que un alto dirigente popular del pasado, Ricardo Costa, admitió que su partido se financió ilegalmente.

Pero Isabel Bonig, tan vehemente en otras ocasiones contra el Consell de Puig y Oltra hizo ayer un discurso de guante de seda. Aseguró que lo ha pasado muy mal como presidenta de los populares, que estos años en los que la corrupción ha acorralado al PP han sido muy duros, con muchas noches sin dormir. En una estrategia calculada para controlar los tiempos, Bonig pidió ayer que se respete la presunción de inocencia y la actuación de la Justicia, un día después de pedir prudencia tras solicitar Ciudadanos una comisión de investigación.

Bonig no exigió ayer responsabilidades porque cree que ya habrá tiempo para hacerlo. Sólo preguntó a Puig. ¿Asumirá las mismas responsabilidades políticas que pedía? ¿Ha hablado con Orengo, Tiller y Cataluña? ¿Devolverán la subvención electoral? ¿Disolverá las Corts y convocará elecciones? Puig respondió que su partido es «radicalmente» distinto al PP, porque desde que estalló la crisis ha aceptado todas las preguntas, la petición de investigación de Ciudadanos y tiene en marcha una comisión interna cuyo resultado se hará público. Y cerró la puerta a un posible adelanto electoral. «Si fuera por razones partidistas, lo haría mañana», respondió para descartar ese escenario.

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