El director general de la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunidad Valenciana, Antonio Rodes, aseguró ayer que la idea es convertir la entidad en una firma «clave» del sector público empresarial «con proyectos razonables financieramente y que tengan rentabilidad social y económica», tras perder 987 millones de euros de su valor patrimonial a lo largo de los 20 años de historia, en la línea de los números que ya desveló este periódico en un balance sobre la gestión de la empresa. Así lo indicó durante una comparecencia en la comisión de Economía, Presupuestos y Hacienda de las Cortes a la que ha acudido para dar cuenta del proceso de reestructuración de la entidad pública y a explicar la trayectoria de la firma pública durante la etapa del PP que ha calificado como «errática, desmesurada y con descontrol en su apuesta financiera».

«No hubo un hilo conductor en sus acciones ni coherencia en su propósito ni su finalidad», puntualizó para indicar que la Generalitat «ha puesto como recursos financieros en esta compañía a lo largo de toda su historia un total de 1.201 millones de euros». Explicó que de ese montante, 576 millones fueron a la constitución del inmovilizado y los restantes 655 millones a sufragar costes tanto de la matriz como de empresas filiales. De este modo, lamentó que «el 48% de los recursos de esta entidad fueron a inversiones tangibles, mientras que el 52% de los recursos fueron a pérdidas». Ante esta situación, remarcó que la primera labor que llevó a cabo el nuevo equipo, tras el cambio de gobierno en 2015, fue rescatar a Proyectos Temáticos «del corredor de la muerte, buscar un saneamiento de la situación y diseñar una nueva perspectiva con proyectos más razonables y sostenibles financieramente».

Antonio Rodes puntualizó que primero sea justaron las cuentas tras descubrir 186,5 millones de euros de activos sobrevalorados y «proyectos fantasmas» que se arrastraban de la etapa del anterior Ejecutivo para, posteriormente, restablecer el equilibrio patrimonial de la firma pública mediante la aportación de socios a los fondos propios de Proyectos Temáticos con una inyección contable de 191,2 millones de euros. Además, remarcó que la Generalitat ha cobrado prácticamente todas las deudas pendientes y ha puesto en marcha proyectos que estaban paralizados como el Auditorio de Torrevieja. A su juicio, Terra Mítica, que era «el proyecto estrella con el que llegó Eduardo Zaplana a la presidencia de la Generalitat, fue un fiasco impresionante. En la joya se perdieron 81 millones pero en el envoltorio bastantes más», indicó. Rodes desveló que el contrato de compraventa del parque se tramitó sin la autorización del Consell y sin informe de la Abogacía, como prevé la normativa autonómica.

Volvo y Ciudad de la Luz

De esta manera, detalló que en el corto plazo la estrategia pasa por proyectos con «rentabilidad social y económica» que, además, estén alineados con el cambio de modelo económico y productivo que la Generalitat. Entre ellos, está la Volvo o gestionar Ciudad de la Luz en la que se va a poner en marcha el Distrito Digital, una iniciativa para generar un ecosistema económico que permita la atracción empresarial y crear un nodo de referencia en el Sur de Europa con una iniciativa, en un primer momento, que facilitaría la llegada de 120 empresas con 500 nuevos empleos.

Este proyecto, explicó, contempla un primer plan, con una inversión de 2,5 millones ampliables a un millón más si se agota antes del 30 de junio, de atracción empresas para atraer talento y por el cual se darán incentivos de un máximo de 40.000 euros a cada empresas que tendrá la obligación de establecer una sucursal o delegación y contratar a un mínimo de tres trabajadores. Además, habrá otro programa de creación de una sociedad de gaming, para el que están buscando un socio tecnológico porque la idea es que la entidad tenga una participación minoritaria. Asimismo, habrá un plan eventos poner en valor el Distrito Digital y darle dimensión.