Proyectos Temáticos podrá continuar con su actividad. La Generalitat, finalmente, salió al rescate de la empresa pública con la que impulsa sus iniciativas más importantes en la provincia -la organización de la Volvo Ocean Race y el Distrito Digital en la Ciudad de la Luz- con una inyección de 191 millones que se materializará con la condonación de préstamos y deudas que liberarán a la firma de su devolución. Una intervención -anunciada por la vicepresidenta Mónica Oltra después de la reunión del Consell y adelantada en su momento por este periódico- obligada después de aflorar, de acuerdo con el balance actualizado hasta finales de 2016, dos «agujeros» que se remontan a la gestión del PP en la administración autonómica por importe de 186,5 millones de euros, unos 31.000 millones de las antiguas pesetas tirados a la basura en «proyectos fantasma» que se quedaron en una maqueta con un ágape de presentación y en instalaciones, a día de hoy, fallidas y en bancarrota.

«Lamentamos tener que asumir esta nueva operación de ruina en diferido. Otro empastre heredado del anterior Consell del PP», ratificó la vicepresidenta que, sin embargo, se felicitó que, tras aflorar la realidad de los balances económicos de la mercantil pública, finalmente, se haya conseguido «por primera vez en los últimos ocho años el aval de los auditores» que, como se recordará, llevaban años sin emitir ni siquiera opinión. La operación de rescate se sustancia en dos resoluciones del Consell para, en primer término, «limpiar» las cuentas y, posteriormente, equilibrar los balances, en uno de los supuestos que, de no haberse tomado estas medidas, obligaba a la disolución en un periodo máximo de dos meses.

El «borrado» de proyectos fallidos se ha traducido en un movimiento contable para sacar de los activos un primer agujero de 78 millones con acciones que nunca se pusieron en marcha y la devalución del valor de los terrenos ubicados en los alrededores de Terra Mítica que, en su momento, se «hincharon» para cuadrar números. Y un segundo de 108 millones, anunciado por este periódico, que incluye la rebaja a la mitad -de 123 millones a 61,5- del valor de la Ciudad de la Luz y dar por perdido un préstamo que, en su día, Proyectos Temáticos concedió al aeropuerto de Castellón y que, por tanto, ya nunca se cobrará. Ese «agujero» total de 186 millones en las cuentas provocó que el patrimonio neto de la sociedad se quedará en 15,6 millones frente a un capital social de 209,3, causa de disolución al estar muy por debajo del 50%.

Esta circunstancia ha obligado al Consell, en una segunda resolución también avalada ayer, a actuar para restablecer el equilibrio patrimonial. Salvar a una sociedad con sede en Alicante que es clave para proyectos económicos que se desarrollan en la provincia y evitar, de esa manera, echar el cierre. La Generalitat realizará una aportación de socios a los fondos Proyectos Temáticos, sin que eso suponga un desembolso financiero de liquidez. La inyección contable, de 191,2 millones, se ha realizado «perdonando» un volumen de deuda -comercial y financiera- que la mercantil tenía con la Generalitat. Un endeudamiento que, en todo caso, ya estaba contabilizado y que alivia las arcas de la mercantil que, a partir de ahora, registrará casi un equilibrio entre su patrimonio y el capital social.