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César Sánchez intenta cortar por lo sano la polémica del reparto de obras de la Diputación

El presidente convoca un pleno extraordinario el viernes para asegurarse la mayoría por la ausencia de un diputado del PP la semana que viene

César Sánchez junto a los diputados Eduardo Dolón, Carlos Castillo y César Augusto Asencio en un pleno. pilar cortés

Resolver el reparto de obras de la Diputación de Alicante de una tacada y en un único pleno. Su presidente, César Sánchez, ha convocado por sorpresa una sesión extraordinaria el próximo viernes para abordar, en una sola mañana, el debate y aprobación del Plan de Obras provincial y la nulidad de las polémicas ayudas «a dedo» concedidas a Busot, Mutxamel y La Nucía, tres pueblos dirigidos por alcaldes del grupo popular de la Diputación. Cortar por lo sano un asunto que está golpeando a la gestión del PP. El máximo responsable de la institución alicantina ha sacado del pleno ordinario que se celebrará dentro de dos semanas el puntiagudo asunto del Plan de Cooperación y el de las subvenciones nominativas (los tres municipios «agraciados» renunciarán a la subvención por acuerdo del PP y el PSOE del último pleno), algo que evitará que la sesión se prolongue durante horas pero que, sobre todo, asegura que los miembros del PP y el tránsfuga estén al completo para evitar recurrir al voto de calidad del presidente.

Como viene siendo habitual, la semana que viene estaba previsto el pleno ordinario del mes de marzo coincidiendo con el primer miércoles de mes. Pero al menos un diputado -César Augusto Asencio- no podrá acudir a la sesión plenaria ordinaria, lo que obligaría a sacar el Plan de Obras de Cooperación con el voto de calidad del presidente en caso de que los socialistas no votaran a favor. El pleno ordinario de marzo, finalmente, se ha fijado para dentro de dos semanas. Utilizar el voto de calidad de César Sánchez para aprobar el plan inversor más importante de la Diputación para los pueblos alicantinos después de dos años consecutivos aprobándose por unanimidad daría una imagen de falta de consenso que Sánchez prefiere ahorrarse. Por otro lado, trasladar la aprobación del plan al siguiente pleno sería retrasarlo demasiado una vez que ya cuenta con el visto bueno de la Comisión de Hacienda, donde salió adelante con los únicos votos del PP y el tránsfuga Fernando Sepulcre.

El portavoz del grupo popular en la Diputación, Carlos Castillo, explicó ayer que la sesión se ha adelantado para no tener que retrasar más la adjudicación de los planes de obras y empezar cuanto antes su tramitación. «Los diez días de adelanto son oro puro en la Administración», señaló. El Plan Provincial de Cooperación a las Obras y Servicios Municipales contempla este año el reparto de 19 millones de euros para 57 proyectos en los municipios que han podido acogerse al mismo, entre los que hay 19 pueblos gobernados por el PP, otros tantos por socialistas, siete de Compromís y doce dirigidos por otros partidos políticos. El programa inversor deja fuera a un total de 16 municipios, todos ellos en manos de gobiernos de izquierdas, como ha venido publicando este diario. Esta situación ha provocado un frenazo en el posicionamiento del PSPV, que anunció que iba a votar a favor del mismo pero que finalmente se abstuvo en la comisión de Hacienda previa al pleno.

Los socialistas se debaten entre la abstención o el voto a favor, ya que las localidades con alcaldes socialistas que entran en el plan son muchas, según explicó su portavoz en la Diputación, José Chulvi. Sin embargo, Chulvi se encuentra con el problema del descontento causado en municipios de su partido que no han podido acogerse al mismo. Destaca el caso de Algorfa, que solicitó 700.000 euros para un pabellón deportivo similar al que el PP concedió a Busot -donde es alcalde es el vicepresidente de la Diputación, Alejandro Morant- con una ayuda «a dedo» y que también recibirá subvención del Plan de Obras de este año. El viernes está previsto que tanto Busot como Mutxamel y La Nucía renuncien a sus últimas ayudas «a dedo» tras acordar el pleno una nueva normativa para las subvenciones nominativas. Compromís, por su parte, estudia la abstención o el voto en contra al Plan de Obras, al igual que la única diputada de EU, Raquel Pérez.

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