El Consell de Ximo Puig y Mónica Oltra está empeñado en marcar el camino al resto de autonomías en el debate del modelo territorial. Así, ha sido el primer gobierno autonómico en aprobar una propuesta de reforma constitucional. Lo hizo el pasado día 9, después de que el conseller de Transparencia y profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Alicante Manuel Alcaraz elaborara un documento a partir de las ideas recogidas en el seminario de invierno del ejecutivo celebrado en Vinaròs y Benicarló.

Este será el texto que Puig presentará en su momento ante la comisión para la evaluación y la modernización del Estado autonómico del Congreso de los Diputados. No hay fecha para la comparecencia, pero el Botànic ha querido ser el primer gobierno en mover ficha.

La citada comisión empezó sus trabajos en enero con una hoja de ruta a largo plazo y un ritmo exento de prisas que tiene que ver con las ausencias de algunos grupos (los catalanes) y el poco interés mostrado en sus inicios por PP y Ciudadanos. No obstante, es el primer intento serio de poner en marcha en el Congreso una modificación constitucional de cara a evitar las tensiones territoriales que el conflicto catalán ha destapado.

El plan de trabajo contempla una primera fase de comparecencias durante seis meses. La primera fue la de los padres de la Constitución vivos: Pérez-Llorca, Rodríguez de Miñón y Miquel Roca. No expresaron mucho afecto a una reforma del texto de 1978, que cumple por tanto 40 años ahora. En este periodo está previsto que pasen por la Cámara Baja todos los presidentes autonómicos.

Ximo Puig espera su turno. El jefe del Consell no ha realizado este único movimiento en Madrid. La pasada semana se entrevistó con el presidente del Senado para acelerar la comparecencia que ha reclamado en la adormecida comisión general de las comunidades autonómicas que está prevista. Presidencia quiere activar este organismo para visibilizar la infrafinanciación valenciana.